Desde luego, para nosotros no es la mejor opción. Si lo creyéramos no habríamos perdido el tiempo con ZTECO. Aun así, es una buena opción. Un buen bofetón en el rostro de quienes llevan cuatro años bacilándonos con su fomar de hacer y entender la política.
Si no creen en nadie, si ya no confían en ningún partido, si piensan que todos son iguales, si creen que haría falta dar un buen revolcón a todos los políticos, hoy sólo pueden hacer dos cosas: Votar en blanco o abstenerse.
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Ninguna de las dos les supone un gran problema a ellos. Se siguen repartiendo el pastel entre el resto de votos. Aunque sólo votaran familiares y militantes, aunque el 99 por ciento de la población votara en blanco o se abstuviera… ellos seguirían repartiéndose poltronas en proporción similar a la actual.
Ciudadanos en blanco pretende cambiar eso. Ciudadanos en blanco pretende que el voto de castigo sea realmente un voto de castigo. Que cuando votes en blanco votes por una concejalía vacía, o una consejería vacía, o un escaño vació. Tal cual. Ninguno me gusta, que ninguno toque poltrona, al menos en lo que a mí respecta.
Las personas que se presentan a las elecciones por Ciudadanos en Blanco se comprometen a no participar en pacto alguno, ni intervenir en debate alguno, ni cobrar salario alguno si consiguen ser elegidos para algún cargo.
Ya decimos, para nosotros no es la solución ideal. Supongamos que el éxito de la iniciativa es rotundo y conseguimos dejar el Ayuntamiento de Arrecife, por ejemplo, practicamente vacío. ¿Luego qué? Bien, ciudadanos en blanco no pretende dar respuesta a esa pregunta. Por eso decimos que CenB no es solución, aunque sí puede ser el purgante previo a la solución. No cabe duda que una situación como la descrita daría pie a una profunda toma de conciencia de todas las fuerzas políticas y sociedad en general acerca de la necesidad de dar un vuelco radical al concepto de política. Sin hacer uso de violencia, la revolución sería inevitable. Los partidos se verían obligados a replantear sus actitudes infantiles y dañinas, y no tendrían más remedio que hacer bien su trabajo para evitar el castigo que, ahora sí, la ciudadanía tendría en su mano infligir.
Así pues, desde Lanzarotelandia vamos a seguir abogando por ZTECO como una opción realista para hacer de los partidos órganos mucho más eficaces de lo que hoy son. Pero también haremos campaña por Ciudadanos en Blanco, para que quienes deseen castigar puedan hacerlo realmente. De lo que se trata es de espabilar e impulsar el cambio necesario.
