[slider title=»Desplegar previo empresarios de Lanzarote»]Es imposible entender la realidad de Lanzarote sin conocer, aunque sea por encima, a sus principales empresarios. Desde luego, cada una de las decenas de miles de habitantes que ha tenido y tiene la isla ha jugado su papel y ha contribuído a que el espacio común que hoy nos alberga sea el que es. Pero sólo unos pocos, apenas un puñado de individuos, han asumido un rol protagonista y fundamental. Con su iniciativa y poder económico fueron capaces de construir grandes obras y de crear muchos puestos de trabajo, pero también manipularon medios de comunicación y jugaron a la política en su beneficio; Impulsaron el desarrollo y fomentaron la llegada de adelantos y lujos impensables antes, pero también esquilmaron territorio y nos condujeron a la insostenibilidad en muy diversos ámbitos.
No es la intención de lanzarotelandia colocar a estos personajes únicos en la picota ni denigrarlos gratuitamente. Como tampoco es ensalzarlos o regalarles piropos. Simplemente describiremos sus empresas y algunos de sus principales negocios. Consideramos fundamental que un buen número de lanzaroteños conozca a quienes están detrás de muchas de las grandes decisiones que se toman en la isla, sus vínculos políticos y también los mediáticos. Porque sólo así comprenderemos esas decisiones y las contextualizaremos. Porque sólo así podremos actuar o dejar hacer, criticar o aplaudir, votar o abstenernos, con pleno conocimiento de causa. Sabremos que cuando determinado político dice «porque es beneficioso para Lanzarote» en realidad está queriendo decir «porque es beneficioso para fulanito… y tal vez también lo sea para Lanzarote». Con un poco de suerte llegará un momento en que un gran número de personas seremos capaces de traducir ese tipo de discurso sin dificultades, y entonces la demagogia política, al saberse absurda, no tendrá razón de ser.
Por supuesto, nadie puede garantizar que nuestra información sea verídica y bienintencionada. Tal vez nosotros también seamos uno más de esos medios manipulados que va a tratar con distintas varas de medir a unos u otros, según nos convenga. En ese sentido lo único que podemos hacer es ofrecer nuestro trabajo y someterlo a su juicio crítico. Vean, contrasten la información con sus propias fuentes y luego decidan. [/slider]
Como ocurre con los Spínola, estamos ante otra dinastía familiar, cuya relevancia es imposible entender analizando a cada uno de sus miembros por separado.
Antonio Becerra Baeza, actual patriarca y presidente de las dos principales empresas del grupo, ya fue concejal del Ayuntamiento de Arrecife allá por los años cincuenta, cuando el franquismo no permitía más partido político que el oficial.
Resulta revelador ojear el semanario Antena de la época, cuando en aquello que llamaban «carnet social», enumeraban las idas y venidas de los principales personajes de la isla. Antonio Becerra aparece unas cuantas veces en dichas reseñas, bien como importante comerciante, bien como concejal.
Quiere decirse que ya por aquel entonces el apellido Becerra era sinónimo de poder en Lanzarote. Poder político y poder empresarial aunados en la figura de un hombre que, no obstante, jamás llamó la atención por excentricidades o ambiciones desmedidas. Sus negocios vistieron a miles de Lanzaroteños durante décadas, ofreciendo un servicio útil y necesario, sin entrar en las especulaciones inmobiliarias que ya por los años setenta empezaban a despuntar. Eso sí, desconocemos cuales fueron las maneras del hombre respecto a sus conciudadanos. Adivinamos que se trataba de un hombre respetado por el régimen, que pocos años después de la guerra civil consiguió amasar una pequeña fortuna y que dicha fortuna le permitió convertirse en alguien importante en Lanzarote. No podemos ir mucho más allá, pero en cualquier caso parece que su actitud fue bastante más cuidadosa y sensata que la de varios de sus hijos.
Las tres empresas
Tres son las empresas que maneja la familia Becerra: Almacenes El Barato S.A., Vallesiete S.A. y Becerra Robaya S.L.
Entre las tres superan ampliamente los seis millones y medio de euros en ventas declarados el último ejercicio. Las tres se dedican al negocio textil, calzado y de complementos. Las dos principales, Almacenes El Barato y Vallesiete (entre ambas facturaron más de cinco millones y medio de euros el pasado ejercicio), cuentan con el mismo consejo de administración: El marido, la mujer y todos los hermanos salvo Juan Carlos Becerra (que sin embargo también formó parte de ambos consejos hasta hace no mucho).
Entenderemos un poco más quienes son los Becerra si decimos que poseen en Lanzarote cadenas como Mango, Zara, Casa, la propia tienda Almacenes El Barato y el centro comercial de la calle Real Anbeba (título formado por las primeras sílabas del nombre Antonio Becerra Baeza). Por no hablar de las propiedades inmobiliarias que con toda probabilidad tendrán desperdigadas en Lanzarote y fuera de la isla (tantos millones de beneficio año tras año hay que meterlos en algún lado).
Nacionalismo postfranquista
Seguramente hoy por hoy el más famoso de los Becerra, superando a su padre, es Juan Carlos. El presidente del PNL, partido escindido del PIL, lleva dedicándose a esto de la política mucho tiempo, siempre con el nacionalismo por bandera. No es un suceso insólito, las élites empresariales de regiones como el País Vasco, Cataluña y también Canarias, supieron ver en el nacionalismo una muy conveniente herramienta desde la cual garantizar la prosperidad de sus particulares negocios y patrimonios. Los Becerra siempre han tenido esa rara habilidad para saber nadar a favor de corriente, fueran cuales fuesen las circunstancias del entorno. Si el padre fue político franquista cuando había que serlo, los hijos fueron políticos nacionalistas cuando tocaba.
Operación Unión
Hoy por hoy tenemos a dos de los hermanos imputados por delitos muy graves en el marco de la Operación Unión. Tan graves como para que el juez solicitara su encarcelamiento durante una temporada. Ubaldo Becerra (PIL) y Fernando Becerra. Antonio Becerra también está imputado, aunque lo suyo tiene menos enjundia. Mientras no se abra el secreto de sumario y se emitan las sentencias no podemos afirmar nada con rotundidad, pero todo apunta a que al menos los que fueron encarcelados no se van a ir de rositas. Por otro lado, el PNL también ha sido gravemente tocado por la Operación Unión, al haber destapado los chanchullos del que hasta hoy mismo era vicepresidente del partido, José Francisco Reyes.
Empresarios, políticos.
A la espera de que se esclarezcan sus responsabilidades en la Operación Unión, nada tenemos en Lanzarotelandia contra los Becerra empresarios. Sus tiendas de ropa han permitido a mucha gente comprar buena calidad a precios bastante asequibles. Trayendo franquicias como Zara o Mango han hecho las delicias de las nuevas generaciones de lanzaroteños, ávidas por comprar ese tipo de ropa moderna y relativamente barata.
Pero los Becerra políticos… ese es otro cantar. Juan Carlos Becerra es otro de esos discípulos aventajados de Dimas Martín, que no ha dudado en jalear la bandera del populismo siempre que ha sido necesario. El PNL no es sino otro chiringuito personalista que usa la excusa del nacionalismo para tratar de recabar un poder que de otro modo nunca obtendría. El PNL, como el PIL, son fenómenos del pasado. Los últimos estertores de una época que afortunadamente va quedando atrás.
Defensa de los Becerra
Ubaldo y Fernando Becerra ingresados en prision, en Diario de Lanzarote
– Negocios útiles, ropa de calidad y a buen precio.
– Ambiciones políticas mezcladas con las empresariales
– Incriminación de varios miembros en la Operación Unión
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