Son muchas las ciudades y municipios donde Podemos ha llegado a acuerdos con otras formaciones políticas para concurrir a las próximas elecciones locales. Ayer mismo supimos de la intención de crear en Las Palmas un partido instrumental capaz de ganar la alcaldía entre varias fuerzas, incluyendo a Podemos, IU o Equo… fórmula que pretenden extender al resto de municipios de Gran Canaria. En Tenerife también hay acuerdos entre estos mismos partidos, además de Sí se Puede, tanto a nivel de municipios como de Cabildo.
Sin embargo, en Lanzarote parece que ya se da por cerrada la posibilidad de llegar a una solución similar, siendo enorme el desconocimiento en torno a la situación actual y como se ha llegado a la misma, incluso entre militantes activos de los partidos implicados.
Con la intención de despejar las dudas más elementales al respecto, nos gustaría exponer a continuación algunos de los hechos objetivos que han acontecido hasta hoy.
Mesa Redonda por la Confluencia
El 29 de enero el periodista Tomás J. López toma la iniciativa de convocar una mesa redonda con la intención de abordar las opciones reales de que las denominadas fuerzas políticas transformadoras lleguen a un acuerdo en Lanzarote. Allí acuden representantes de Alternativa Ciudadana, Aldem Haría, Alternativa Nacionalista Canaria, Izquierda Unida y Podemos. Entre los asistentes también hay miembros del Partido Verde Canario y Equo.
El ambiente del encuentro fue positivo en general, aunque se pusieron sobre la mesa dos peros importantes. Por un lado el Secretario General de IU intervino para decir que la única fórmula que admitía su partido era la de la coalición entre partidos. Y por otro lado ANC advirtió que en sus estatutos se les prohibía pactar con un partido español, en referencia a Podemos o IU.
En ese momento Podemos en Lanzarote todavía se encontraba en pleno proceso de estructuración orgánica, y el único Consejo Ciudadano electo con el que contaba en la isla era el de Arrecife, aparte de los secretarios generales de Tías, San Bartolomé, Yaiza y Teguise. Es importante señalar este dato, porque determinó el devenir de los acontecimientos. Hasta que no se constituyó el Consejo Ciudadano de Podemos en Lanzarote, Podemos no contó con un órgano interlocutor de carácter insular capaz de entablar negociaciones y trasladar las mismas a su asamblea.
Somos Lanzarote, Podemos y el Cabildo
Para cuando Podemos en Lanzarote por fin tuvo su Consejo Ciudadano Insular, ya existía un partido instrumental creado entre AC, Aldem, ANC y el Partido Verde Canario. Un partido cuyos integrantes habían convenido presentarse al Cabildo como tales, usando la marca Somos Lanzarote. Sin embargo, Podemos, al contrario de lo que ocurre en los municipios, sí puede presentarse al Cabildo como Podemos, y sus militantes no están dispuestos a renunciar a tal posibilidad para entrar en Somos Lanzarote.
Es esta única circunstancia la que ha bloqueado cualquier opción de confluencia tanto en el Cabildo como en los municipios. Desde Somos Lanzarote se pretendía que Podemos se integrara en su recién creado partido, tanto en municipios como en Cabildo, pero Podemos Lanzarote no estaba dispuesto a renunciar a su marca en la Isla, condición imprescindible para que la confluencia fuera posible.
Por su parte, Podemos Lanzarote pedía a los integrantes de Somos Lanzarote que se integraran en Podemos para el Cabildo, participando en su proceso de primarias telemático en el ágora voting. Pero el ofrecimiento fue rechazado.
El hecho de que Somos Lanzarote y Podemos pidan el voto por separado en el Cabildo impide cualquier tipo de acuerdo también en los municipios, pues aunque Podemos no se pueda presentar con su marca en los mismos, sus integrantes no quieren participar en un proyecto que va competir contra Podemos en otra instancia. Dicho de otro modo, se verían en la situación de pedir el voto para Somos Lanzarote en sus municipios, siendo Somos Lanzarote un partido que se enfrenta a Podemos en el Cabildo.
¿Por qué en otras islas sí y en Lanzarote no?
Lo cierto es que Podemos se presenta con su propia marca a los Cabildos de todas las islas salvo el de La Gomera, donde no tiene afiliados suficientes. Sin embargo esto no ha impedido que se llegue a acuerdos con otras formaciones. ¿Por qué lo que no fue un impedimento en otras islas sí lo ha sido en Lanzarote? Esta es una pregunta delicada cuya respuesta depende mucho de a quien se la formules. En Tenerife, Sí se Puede no tuvo ningún problema para participar en las primarias de Podemos al Cabildo… pero también es verdad que Sí se Puede ha sido parte de Podemos en esa isla desde el principio. En Gran Canaria tampoco hay ningún partido instrumental que haya manifestado su intención de presentarse al Cabildo enfrentándose a Podemos, así que no existe ningún problema en crear ahora un partido que solo vaya a los municipios, como así parece que van a hacer.
¿Existe todavía alguna remota posibilidad de acuerdo?
Solo hay dos posibilidades para desbloquear la situación: O Somos Lanzarote renuncia al Cabildo y se presenta solo en los municipios, incluyendo en sus filas a los miembros de Podemos, o Podemos Lanzarote renuncia al Cabildo y se integra plenamente en Somos Lanzarote. Ninguna de las dos posibilidades es realista. En los municipios tampoco se puede alcanzar ningún acuerdo mientras exista esa confrontación Somos-Podemos a nivel de Cabildo. Así pues todo está abocado a un enfrentamiento directo entre Podemos, el partido instrumental que van a crear los integrantes de Podemos para los municipios y Somos Lanzarote.
Sobre el reparto de responsabilidades respecto a esta situación, hay para todos los gustos. Unos dirán que los creadores de Somos Lanzarote se precipitaron creando su partido instrumental, queriendo aprovechar la ventaja de que Podemos todavía no tuviera un consejo ciudadano insular electo. Otros dirán que los de Podemos no tuvieron la generosidad de renunciar a su marca en la isla, como sí hicieron ellos. Unos cargarán las tintas sobre unas personas y otros sobre otras. En cualquier caso, independientemente de responsabilidades, la realidad es la que es, y ahora lo que toca es apechugar con ella.